Dejando espacio para la paternidad
¿Será que a veces las mamás queremos abarcar tanto que no dejamos espacio para la paternidad? La verdad es que en casa siempre quise creer que era algo mas parejo pero en algunas ocasiones Marco si me ha dicho que hay ocasiones que siente que yo no confió, que actuó como si nada mas yo supiera como cuidar, educar o consolar a Angel.
Y justo en estos días sucedió el incidente con el gorila Harambe seguido de la lapidación a su madre ( no a los padres, a su madre) y me cayo el veinte que claro, todo el tiempo ponemos la responsabilidad de la crianza y la seguridad en los hombros de las madres y entonces ceder espacio no nos parece ni siquiera natural. Aceptamos que ellos sean los divertidos que vuelvan a ser niños con nuestros hijos mientras jueguen con nuestras reglas pero es que también tenemos derecho a permitirnos jugar y las normas de la casa se deben poner y respetar juntos.
Abriendo la puerta a la paternidad
En la crianza en pareja no hay lugar para protagonismos, es mejor cuando nos observamos y repartimos en medida de lo posible las actividades y responsabilidades, ¿quién no se ha enamorado un poco mas al ver a su pareja cuidar, alimentar, dormir o enseñarle algo nuevo a su hijo? Del otro lado de la puerta la sociedad aún no cree que los padres tengan derecho estar presente los primeros días de vida de su hijo ( o que nosotras lo necesitemos), que él puede cuidar en una enfermedad a lo pequeños o que también les gusta asistir a sus actividades escolares y entonces no hay conciliación para ellos, luchar por ellos no será sencillo si no comenzamos a darles entrada en casa, que compartan esos pequeños pero mágicos momentos, que se frustren con los hijos (seamos honestas, nos pasa) y que aprendan a lidiar con ello, aceptemos sus ideas (porqué ellos también investigan) que los bañen, que los duerman y hagan con ellos las tareas, que exploten su paternidad y entonces querrán luchar por ella.
De a poco vamos viendo a mas papás comprometidos de una manera integral, que portean, van a las juntas escolares, buscan espacios de convivencia y no, no es que tengamos que hacerles un monumento o agradecerles, estoy consciente que es parte de una dinámica necesaria y que beneficia a toda la familia por igual pero lo que si debemos tomar en cuenta es que no necesariamente es una conducta aprendida, muchos padres de ahora no vivieron eso en su infancia, es un cambio que es mejor cuando nosotras lo apoyamos.
Además su tiempo juntos se convierte en un tiempo para ti, mientras Marco duerme a Angel yo puedo tomarme un te y ver algo en netflix, cuando se bañan adelanto trabajo y de vez en vez salgo a tomar un cafe o ver una película, tranquila de saber que ellos dos están juntos pero sé que hay cosas en las que me falta ceder así que aprovechare este mes para trabajarlo juntos.
¿Les ha pasado? ¿Les cuesta trabajo soltar?